Wallerstein, Obama e a crise.

O Profesor Ivonaldo Neres Leite, meu amigo e ex-colega, ex-professor da UERN, agora da UFPE, manda-me uma dica de link para uma entrevista com Immanuel Wallerstein. Trata-se de um áudio em inglês. Leia o comentário de Ivonaldo:

É uma abordagem, penso eu, equilibrada, realçando limites e possibilidades e, acima de tudo, compromissada com a análise social autônoma, sem ceder aos holofotes ou as modas acadêmicas. O que não é surpresa para aqueles que, como eu, conhecem o seu tour de force analítico de londa data. Tomei contacto com os seus textos a partir do meu interesse por Fernand Braudel, nos anos juvenis, e desde cedo convenci-me que a interpenetração entre história e sociologia não permite disputa corpotativa entre estes dois campos. Mais tarde, frequentei um seminário dele em Coimbra, por ocasião do Relatório da Gulbekian ("Para Abrir as Ciências Sociais"), e não me decepcionei. A menção feita por ele ao Brasil, na entrevsita, creio que seja algo a ter em conta.


Você pode baixar o áudio aqui.

Negros cubanos estão entusiasmados com Obama

A Obamania varre a Ilha. Leia abaixo reportagem publicada hoje no jornal espanhol El País. A matéria faz um retrato não muito animador da situação dos negros em Cuba. Vale a pena conferir!


El 'efecto Obama' sacude la isla

La victoria del demócrata Barack Obama en Estados Unidos ha tenido considerable repercusión en Cuba, y no sólo por razones políticas. Que el presidente electo norteamericano sea negro y descendiente directo de un emigrante keniano ha tocado la sensibilidad de muchos cubanos que desde hace años vienen denunciando que el racismo es todavía un problema grave en su país, aunque no se refleje en los medios oficiales.

Medio siglo después del triunfo de la revolución, que convirtió en bandera de la lucha contra la discriminación racial, los negros en Cuba siguen ocupando los peores trabajos, viviendo en las peores casas y llenando las cárceles, según diversos estudios.

El poeta y ensayista cubano Víctor Fowler escribía a los pocos días del triunfo de Obama: "Todavía siento un susto en pleno pecho. Lo que se empoza en mis ojos son lágrimas de orgullo y de un profundo alivio. Oigo a Barack Obama. (...) Miro mi piel, miro las de mis hijos, lloro y sonrío".

Las palabras de Fowler, de 48 años y ganador de varios premios literarios en su país, resumen el sentimiento de buena parte de la población negra y mestiza de Cuba, y probablemente de todo el mundo. La elección de Obama ha servido de revulsivo antirracista en todas partes, también en la isla.

"Nada va a cambiar, es sólo un símbolo. Pero saca a la luz un problema que en este país sigue siendo un gran tabú, pues supuestamente la discriminación acabó con la revolución", dice Ana, una profesional negra que asegura tener amigos que han sido rechazados en trabajos de responsabilidad en el sector turístico "por el color de su piel". "Por supuesto, sin que nadie lo admita", dice.

La denuncia es dura, pero no tan difícil de demostrar. Las estadísticas oficiales confirman que entre los dirigentes, profesionales y técnicos del sector turístico las proporciones de negros y mestizos no superan el 5%. Y lo mismo sucede en otros sectores emergentes de la economía, en los que hay mayores posibilidades de conseguir dólares y pocos directivos de piel oscura.

En el año 2006, los investigadores Rodrigo Espina y Pablo Rodríguez Ruiz, del Centro de Antropología, publicaron en la revista Temas uno de los pocos trabajos científicos conocidos sobre el asunto del racismo en la Cuba actual. Arrojaron datos reveladores: en el turismo, los negros se ubican principalmente en puestos de trabajo no relacionados directamente con el turista, hacia el interior de las instalaciones, y reciben 1,6 veces menos propinas que los blancos; la población negra y mestiza ocupa las peores viviendas, y trabajan fundamentalmente como obreros; y las remesas de dinero que envían familiares del extranjero llegan 2,5 veces más a blancos que a negros.

Según el más reciente censo de población, realizado en 2002, de los 11,2 millones de cubanos, 65% son blancos, 10% negros y 25% mestizos. Muchos investigadores cuestionan la confiabilidad de estos datos -obtenidos mediante la simple declaración de los encuestados- y colocan muy por encima la proporción de la población de raza negra y mestiza: la elevan al 50% del total. "Aquí casi todo el mundo tiene la sangre mezclada, pero el que sólo tiene una pintica se declara blanco", asegura la antropóloga Natalia Bolivar.

En el Parlamento cubano, cerca del 65% de los diputados son blancos, el 19% negros y el 16% mestizos. En el Consejo de Estado, máxima instancia del Gobierno, 11 de sus 31 miembros son negros y mestizos, mientras que en el Buró Político del Partido Comunista la proporción es 5 de 24.

Según Bolívar, "en Cuba no existe racismo institucional, pero no es fácil borrar 300 años de historia". Cuba fue la última colonia en abolir la esclavitud, en 1886, hay que recordarlo. Esteban Morales, investigador del Centro de Estudios de Estados Unidos, publicó este año Desafíos de la problemática racial en Cuba, un libro en el que plantea que si bien desde las instituciones del Gobierno se ha luchado activamente contra el racismo, todavía sobrevive "la discriminación, apoyándose en los estereotipos negativos sobre los negros y las formas de supervivencia de estos prejuicios".

En Cuba, cuando un negro destaca en su trabajo o es elegante, se bromea: "Parece blanco". Y las profesiones que la sociedad parece reservar a negros y mulatos son las de músicos, deportistas y policías, aunque hay decenas de miles de médicos y profesionales de raza negra. En la televisión prácticamente no aparecen presentadores negros, y los papeles que realizan los actores negros o mulatos en las telenovelas casi nunca son protagónicos.

"La limitada presencia de cuadros de dirección, negros sobre todo, y mestizos, en las estructuras de dirección del Estado y de las empresas, en particular dentro de las corporaciones y el turismo, es preocupante", asegura Morales en su libro. A juicio de este autor, la crisis económica de la década de 1990, tras el derrumbe de la Unión Soviética, fue un golpe demoledor que perjudicó a los sectores más desfavorecidos, sobre todo a los negros, e hizo rebrotar la discriminación.

Ello puso en evidencia que los que "idealistamente" creían resuelto el problema del racismo en Cuba estaban equivocados. Morales y otros investigadores, como Fernando Martínez Heredia, señalan que durante demasiado tiempo el tema se ha eludido precisamente por considerar que las heridas raciales podían suponer una "debilidad" y un "riesgo" de división para la revolución.

Ahora se trata de que el problema del racismo se discuta abiertamente, a la luz pública y sin edulcorantes, pues es muy serio. El Partido Comunista creó a principios de este año una comisión -que preside Heredia- para rescatar la memoria histórica de los que siempre, hasta hoy, han llevado la peor parte. Pero aún falta mucho camino por andar.

Alex Galeno, Obama e o medo do gozo dos marxistas

Devo ao colega Alex Galeno, professor do Departamento de Ciências Sociais da UFRN, a assertiva de que a esquerda brasileira, em especial a dita acadêmica, teme o gozo da vitória. Daí adorar tanto a derrota. Na prática, isso se traduz, sempre, na elaboração dos piores cenários. Lembrei-me do Alex quando soube ontem, por fonte merecedora de crédito, que, em uma performance acadêmica recente, certo luminar do marxismo acadêmico brasileiro, comentando a vitória eleitoral de Barak Obama afirmou, para espanto da platéia, o seguinte: “não se iludam com o Obama, ele é um negro de alma braça (sic)”. Dado que há um clima de comemoração, nas áreas, digamos, mais arejadas da vida social com a eleição de Obama, é necessário, para se ser crítico, supõe a vulgata, mobilizar todas as armas (decerto, pelo visto, não as "da crítica) contra as "falsas ilusões". Além do medo do gozo ou, quem sabe, um gozo limitado à derrota, esse tipo de afirmação não é apenas uma manifestação “infeliz”, mas também reveladora do racismo embutido que viceja em certos ambientes acadêmicos brasileiros.

Em tempo: o luminar que produziu a pérola racista é tido nas searas do serviço social como uma espécie de “guia genial”. Suas obras, geralmente referenciadas em Lukacs, são incorporadas por alunos e alunas da área (tanto da graduação quanto da pós) com o mesmo fervor com que a militância chinesa da Revolução Cultural devorava o “Livro Vermelho” de Mao-Tse-Tung.

Artigo de Peter Burke sobre a eleição de Barak Obama

Peter Burke dispensa apresentações. Um dos mais importantes historiadores da atualidade, escreve regularmente para o caderno MAIS, do jornal Folha de São Paulo. Seus textos, bem escritos e leves, são sempre instigantes e provocativos, sem que, para tanto, precise escorregar para agressões baratas e xingamentos, como está se tornando lugar-comum no Brasil. Reproduzo abaixo trechos de seu artigo de hoje. Trata, ninguém pode escapar do tema, da eleição de Barak Obama para presidente dos EUA.


MESTIÇO BELEZA

Na noite em que Barack Obama foi eleito, eu estava numa festa no Harlem [em Nova York]. A festa era mista sob um aspecto -os convidados eram de todas as cores-, mas uniforme sob outro: éramos todos partidários de Obama.
Quando os resultados foram anunciados, a reação de nosso anfitrião, um americano branco, de meia-idade, do Tennessee, foi: "Recebi meu país de volta!". Pela primeira vez em oito anos ele pôde sentir orgulho de ser americano. Foi libertado do peso de uma vergonha, e, nesse sentido, seu imaginário cultural, e o de pessoas como ele, foi transformado.

Por outro lado, a visão de mundo ou o imaginário cultural de americanos de pequenas cidades do interior, de cujos contingentes são recrutados muitos dos partidários de John McCain e Sarah Palin [republicanos], deve ter recebido um golpe duro com sua derrota, obrigando essas pessoas a tomar consciência do fato de que a maioria dos americanos -embora essa maioria seja relativamente pequena- não compartilha suas opiniões.

(...)

Vinte anos atrás, quando o pastor Jesse Jackson tentou pela segunda vez obter a indicação a candidato presidencial pelo Partido Democrata, algumas pessoas comentaram que "o país ainda não estava preparado" para um candidato afro-americano.
Agora, ficou claro que está. Numa cultura em que as pessoas admiram os "vencedores" e desprezam os "perdedores", a vitória de Obama tem conseqüências culturais ainda maiores do que poderia ter em outros lugares -embora a imagem vista na TV americana de quenianos comemorando a eleição de um "deles" foi um lembrete vívido do impacto global deste acontecimento.
Mesmo assim, para um observador de fora, seja ele inglês ou brasileiro, pode muito bem parecer que a eleição de Obama não teve -ou ainda não teve- as conseqüências culturais que se poderiam prever.

Desse ponto de vista, o fato significativo é que Obama não é "negro", como os norte-americano o descrevem, mas mulato. Ele tem familiares brancos, além de negros.

(...)
A posição de Obama de chefe de Estado também contesta a percepção tradicional dos EUA como sendo divididos em duas partes, uma branca e uma negra. Se sua eleição puder ajudar a dissolver essa percepção, será a maior transformação de todas no imaginário cultural dos norte-americanos.

PETER BURKE é historiador inglês, autor de "O Que É História Cultural?" (ed. Zahar). Escreve na seção "Autores", do Mais! .
Tradução de Clara Allain.

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A esquerda americana e a vitória de Obama

Êxtase. A palavra define bem o estado de espirito dos progressistas. A foto acima ilustra um artigo de celebração publicado no combativo The Nation. No site do conhecido jornal, destaco This election will transform American life in ways we cannot yet fully imagine, escrito por William Greider.

Veja no UOL matéria e vídeo sobre a vitória de Obama

Leia matéria e assista vídeo sobre a vitória de Obama no UOL. Clique aqui.

Obama Presidente: valeu a espera!

Obama é show

Daqui, da periféria do império, estou torcendo por Obama. Mas, à parte isso, e deixando o passionalismo de lado, quando a gente assiste ao material da campanha dele, não há como não concordar, de que se trata de um "show de bola". Uma aula de marketing político. Assista e confira!